En la actualidad, la administración de servidores es más relevante que nunca.
“El gasto en infraestructura de TI a nivel mundial se espera que alcance los 731 mil millones de dólares para 2023”
Con la creciente dependencia de las empresas en la tecnología, es esencial aprender a administrar de manera eficiente los servidores que respaldan estos sistemas.
En este artículo, compartiremos 10 consejos prácticos para mejorar tus habilidades en la administración de servidores.
- ¿Qué es la administración de servidores?
- Top 10: consejos para administrar servidores
- 1. Elige el sistema operativo adecuado
- 2. Monitoreo constante del rendimiento
- 3. Implementa copias de seguridad regulares
- 4. Gestiona los parches y actualizaciones
- 5. Implementa medidas de seguridad
- 6. Uso de la virtualización
- 7. Establece una política de contraseñas sólidas
- 8. Monitorea y analiza los registros del servidor
- 9. Implementa redundancia y balanceo de carga
- 10. Capacitación y certificaciones en administración de servidores
- Domina la administración de servidores y asegura tu futuro
¿Qué es la administración de servidores?
La administración de servidores es el proceso de gestionar, mantener y supervisar los servidores que alojan aplicaciones, bases de datos y otros servicios.
Esta tarea es crucial para garantizar el rendimiento, la seguridad y la disponibilidad de los recursos de TI en una organización.
Es por ello que queremos brindarte en este artículo consejos útiles para optimizar la gestión de servidores.
Top 10: consejos para administrar servidores
Los servidores son el cerebro de la organización, en ellos se envía, recopila, analiza y distribuye el capital lógico representado en datos que luego será usado para la toma de decisiones
1. Elige el sistema operativo adecuado
Seleccionar el sistema operativo (SO) correcto es fundamental para una administración de servidores eficiente.
Por ejemplo, si tienes aplicaciones basadas en Linux, es recomendable utilizar un SO como CentOS o Ubuntu. Por otro lado, si usas aplicaciones de Microsoft, Windows Server sería la opción más adecuada.
Al elegir el sistema operativo correcto, también debe tener en cuenta la compatibilidad con el hardware y la infraestructura de su organización, así como las licencias y costos asociados.
Además, es fundamental considerar factores como el soporte y la comunidad que rodea a cada sistema operativo.
Una comunidad activa y un amplio soporte pueden facilitar la resolución de problemas y la implementación de soluciones de seguridad.
No olvide evaluar el ciclo de vida del sistema operativo, ya que un SO con un ciclo de vida más largo puede reducir la necesidad de actualizaciones y migraciones frecuentes, lo que a su vez disminuirá el riesgo de incompatibilidades y problemas técnicos.
Tal vez te interese leer => Windows Server 2019: Todo lo que necesitas saber
2. Monitoreo constante del rendimiento
Vigilar el rendimiento del servidor es esencial para detectar problemas antes de que afecten a los usuarios.
Herramientas como Nagios, Zabbix y PRTG Network Monitor te permite supervisar en tiempo real el rendimiento del servidor, como el uso de la CPU, memoria y ancho de banda.
Estas herramientas también pueden ayudar a identificar el cuello de la botella en el rendimiento y proporcionar información sobre cómo optimizar los recursos del servidor.
Además de monitorear el rendimiento en tiempo real, también es importante realizar análisis periódicos del rendimiento a largo plazo.
Esto te permitirá identificar tendencias y patrones en el uso de recursos, lo que a su vez puede ayudarte a planificar mejor las actualizaciones y expansiones futuras.
3. Implementa copias de seguridad regulares
Las copias de seguridad son cruciales para proteger tus datos. Configure una rutina de copias de seguridad automatizadas, tanto locales como en la nube, para garantizar la recuperación de datos en caso de desastre.
Un caso de uso podría ser utilizar soluciones de nube privada como Backup as a service o alguna opción en las nubes públicas como Amazon S3 o Google Cloud Storage para almacenar tus copias de seguridad en la nube.
Al establecer un programa de copias de seguridad, asegúrese de tener en cuenta la frecuencia, el tipo (completa, incremental o diferencial) y la retención de las copias de seguridad, según las necesidades de su organización.
Además, es fundamental verificar regularmente la integridad de las copias de seguridad y realizar pruebas de restauración para asegurarte de que puedan recuperarse correctamente en caso de necesidad.
La encriptación de las copias de seguridad también es una buena práctica para proteger sus datos sensibles, especialmente si se almacenan fuera del sitio o en la nube.
Tal vez te interese leer => Red Hat Enterprise Linux: ¿qué es y para qué sirve?
4. Gestiona los parches y actualizaciones
Mantén tus servidores actualizados con los últimos parches de seguridad y actualizaciones de software para protegerlos de vulnerabilidades y amenazas.
Por ejemplo, si emplea Windows Server, puede configurar Windows Update para aplicar automáticamente las actualizaciones críticas. Del mismo modo, en entornos Linux, puede utilizar herramientas como apt, yum o zypper para mantener sus paquetes al día.
Además de aplicar actualizaciones de seguridad, es importante ejecutar pruebas completas de compatibilidad antes de implementar nuevas versiones de software o cambios importantes en la configuración. Esto ayudará a prevenir problemas y garantizará la estabilidad del sistema.
5. Implementa medidas de seguridad
Asegura tus servidores utilizando firewalls, sistemas de detección de intrusiones (IDS) y herramientas antivirus de próxima generación como EDR.
Además, limita el acceso a sus servidores mediante la autenticación de dos factores y la preservación de privilegios mínimos a los usuarios.
La segmentación de la red y la implementación de zonas desmilitarizadas (DMZ) también son prácticas de seguridad efectivas para proteger sus servidores y reducir la superficie de ataque.
Además de estas medidas técnicas, es fundamental establecer políticas y procedimientos de seguridad claros para todos los empleados y administradores de sistemas.
Esto incluye capacitación sobre seguridad, el uso de protocolos de comunicación seguros y la implementación de políticas de respuesta a incidentes.
6. Uso de la virtualización
La virtualización permite ejecutar múltiples sistemas operativos y aplicaciones en un solo servidor físico, lo que mejora la eficiencia y reduce los costos.
VMware y Hyper-V son ejemplos de soluciones de virtualización populares. La virtualización también facilita la administración y el mantenimiento de los servidores, ya que permite realizar copias de seguridad, restauraciones y migraciones de manera más sencilla y rápida.
7. Establece una política de contraseñas sólidas
Una política de contraseñas sólidas es esencial para proteger sus servidores de accesos no autorizados.
Exige contraseñas largas, con una combinación de letras, números y símbolos, y establece la caducidad de las contraseñas para garantizar la seguridad a largo plazo.
También es útil implementar un sistema de bloqueo de cuentas para prevenir ataques de fuerza bruta y proteger contra intentos de acceso no autorizado.
Además de las contraseñas, considere el uso de claves SSH para la autenticación en servidores remotos, especialmente administrados y usuarios con privilegios elevados.
Las claves SSH proporcionan un nivel adicional de seguridad y pueden reducir significativamente el riesgo de accesos no autorizados.
8. Monitorea y analiza los registros del servidor
Los registros del servidor contienen información valiosa sobre el rendimiento y la actividad del sistema.
Utiliza herramientas como Logstash, Graylog o Splunk para analizar y monitorear los registros en tiempo real, lo que te permitirá identificar y solucionar problemas rápidamente.
La recopilación y análisis de registros también es fundamental para cumplir con las normas y requisitos de cumplimiento en muchas industrias, así como para detectar actividades sospechosas y posibles brechas de seguridad.
9. Implementa redundancia y balanceo de carga
La redundancia y el balance de carga son cruciales para mantener la disponibilidad y el rendimiento de sus servidores.
Emplea tecnologías como el balanceo de carga de red (NLB) y el clúster de conmutación por error para distribuir el tráfico y garantizar la continuidad del servicio en caso de fallas del servidor.
Estas soluciones también pueden ayudar a distribuir la carga de trabajo entre múltiples servidores, mejorando el rendimiento y la escalabilidad.
Además, considere implementar redundancia en el almacenamiento, como RAID (Redundant Array of Independent Disks) y el almacenamiento distribuido, para proteger sus datos y garantizar la continuidad del servicio en caso de fallas de hardware.
10. Capacitación y certificaciones en administración de servidores
Adquirir conocimientos y habilidades en administración de servidores es esencial para el éxito profesional en el ámbito de la tecnología.
Las certificaciones como certificación de Asociado Certificado de Soluciones de Microsoft (MCSA), Microsoft Certified Solutions Expert (MCSE), Linux Professional Intitue Certification (LPIC) y Red Hat® Certified Engineer (RHCE®) son algunas de las más reconocidas y respetadas en la industria.
Estas certificaciones no solo validan sus conocimientos y habilidades, sino que también te ayudan a mantenerte actualizado con las últimas tendencias y tecnologías en el campo de la administración de servidores.
Domina la administración de servidores y asegura tu futuro
La administración de servidores es una habilidad clave en la era digital actual.
Al seguir estos 10 consejos prácticos, estarás en el camino de convertirte en un administrador de servidores experto.
Si deseas profundizar en tus conocimientos y mejorar aún más tus habilidades, te recordamos a inscribirte en nuestro curso de Administración avanzada de Servidores.
¡Aprovecha esta oportunidad para asegurar tu éxito profesional y marcar la diferencia en el mundo de la tecnología!
Saber más sobre el Curso de Administración Avanzada y alta Disponibilidad de Servidores